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La multi y la interculturalidad son la esencia del desarrollo humano
Eguna: 12.07.2012 | Iturria: www.diariovasco.com

Bienvenida Sánchez. Fuente foto: www.diariovasco.com
Bienvenida Sánchez Alba. Profesora en la UCM
Dentro del programa del Día Multicultural que se celebra hoy en Legazpi, a las 10.00 de la mañana se llevará a cabo en el salón de actos de la Casa de Cultura una conferencia sobre multiculturalidad, de manos de Bienvenida Sánchez Alba, que en otra ocasión visitó la localidad para participar en el programa de Profesores y Educadores de Oripavi. Bienvenida Sánchez Alba es profesora de la Facultad de Educación en la Universidad Complutense de Madrid e investigadora en Pedagogía Sistémica. Ha sido profesora de educación infantil, educación primaria y secundaria, adultos y formación del profesorado. Coordinó y dirigió los departamentos de educación de Casa de América y de Casa Asia. Ha participado y coordinado proyectos de cooperación internacional e intercultural.

¿Qué es para usted la multiculturalidad?

La multiculturalidad es el mejor antídoto contra el aburrimiento y la involución cultural. Y más aún si la multiculturalidad se convierte en interculturalidad, es decir, a la coexistencia de diversas culturas en un tiempo y un espacio común, que es la multiculturalidad, se suma a convivencia y la interrelación. Entonces las culturas nos conocemos y reconocemos las unas en y con las otras, nos aportamos novedades que pueden ayudarnos a salvar obstáculos y mejorar nuestras respectivas calidades de vida. Si no hubiera sido por la multi e interculturalidad hoy no gozaríamos de la tortilla de patata o de bacalao, por ejemplo, que son platos mestizos, pues la patata vino de América. Al igual que el tomate y el pimiento, entre otros muchos; el cacahuete, el arroz o el trigo, vieron de África. Sin la interculturalidad no hubieran sido posibles gozar con ritmos como el tango, la samba, el jazz, el rock, el rap o el reggae. Ni tendríamos joyas literarias como "El libro de las Maravillas de Marco Polo" o "Cien años de Soledad", ni el delicioso boom literario latinoamericano, que funde la tradición de las literaturas mágicas gallega, cántabro asturiana y vasca con las tradiciones indígenas americanas. Que previsible y anodino sería nuestro mundo cotidiano sin la diversidad que hemos recibido de otros pueblos y culturas. Y la mayor de las bellezas recibidas: el mestizaje humano, nacido de algo tan disparejo como un espermatozoide y un óvulo, origen inequívoco de la vida, del hermoso milagro de cada rostro, donde se pueden adivinar las huellas de la evolución de la especie, la mezcla de amor y de dolor que han hecho el mundo hasta llegar al mismísimo momento en que los lectores lean esta escritura, que es de origen latino, en una página con numeración de origen árabe. En definitiva, la multiculturalidad y la interculturalidad son la esencia misma del desarrollo humano y social, de la cultura misma.

En esta localidad conviven más de 30 nacionalidades distintas, ¿un día como hoy es una buena excusa para conocernos mejor?

Sí es una maravillosa excusa para descubrir las limitadas fronteras de nuestras costumbres, pensamientos y creencias, al comunicarnos con los que valoramos como foráneos y descubrir que con sus distintas tradiciones, reflexiones y certezas podemos ampliar la mirada y quizá esa dificultad que se nos hace un mundo se reduzca o desaparezca. Es una excelente excusa para saborear y agradecer el sólo milagro de estar vivos para seguir compartiendo y aprendiendo de las suertes de colores, sabores, olores, ritmos que aquí se nos muestra.

¿Cómo podríamos interrelacionarnos en el día a día?

Aprendiendo de los niños, ellos miran la vida con los ojos del asombro, siempre están dispuestos a jugar con cualquiera que les sonría aquí y ahora. Me viene al magín un pasaje que describe bellamente Kirmen Uribe en su novela Bilbao- New York- Bilbao, dos niñas juegan en una pradera a cazar mariposas con una sábana, una era del pueblo, Ondarroa, y la otra de origen senegalés. Más allá de que entendamos en el foráneo, o no, sus palabras, su forma de vestir o expresar, sus creencias, en el lenguaje de nuestros cuerpos y miradas, está el anhelo común de ser felices, del respeto a lo nuestro y nuestras raíces, del mejor legado a nuestros hijos; el deseo de paz, de recibir y dar amor. Si tan importantes cosas en común y todos queremos ser respetados y reconocidos es fácil relacionarnos con los otros: me relaciono como quiero que se relacionen conmigo.

¿Qué vamos a encontrarnos este sábado en la conferencia?

Diversidad y divergencia, porque siempre procuro ser coherente con lo que expongo. Además de palabras que debo a las reflexiones, experiencias y estudios propios y ajenos que la vida ha puesto felizmente en mi camino, encontraremos, imágenes, música, poemas, cuentos y algún juego si ha lugar, de otros rincones del mundo. A fin de percibir como el corazón y la cabeza se nos ensanchan y liberan cuando sentimos y reflexionamos con lo distinto y le damos también un espacio de gratitud.

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