El presidente de la Fundación Iberoamericana de Derechos Humanos y profesor de la Universidad Pablo de Olavide (Sevilla), Joaquín Herrera, abogó por trabajar en la creación de una "nueva cultura" de los derechos fundamentales en España que "no los considere como productos culturales" sino como conceptos universales.

En declaraciones a Europa Press en el marco de los cursos de verano que organiza la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA), en su sede sevillana de La Cartuja, Herrera concretó que el "punto de partida" de esta nueva definición debe ser la concepción de que la diversidad, la pluralidad y la interculturalidad son "los hechos básicos de los que hay que partir" para conseguir políticas de igualdad.

De igual modo, explicó que en la raíz lingüística de India o el Asia Meridional no existe el término derecho y, en su lugar, se emplea el de "deber o justa exigencia". Esto contrasta, según el experto, con nuestra concepción, "en la que partimos de tener derechos sin tener ningún deber previo". "Estas dos percepciones culturales nos permiten darnos cuenta de que, cuando hablamos de los derechos humanos, nos referimos a productos culturales múltiples, variados y diferentes", aseveró.

En ese sentido, puso de manifiesto la existencia de una "pluralidad de percepciones" entre las diferentes culturas con respecto al concepto de dignidad, al tiempo que constató que los inmigrantes que vienen del Africa subsahariana "reaccionan frente a la realidad en todos los niveles de manera diferente" a como lo hacemos los occidentales.

No obstante, Herrera, que participó en el ciclo "Interculturalidad, diálogo interreligioso y comunicación", apuntó que "lo importante es que los inmigrantes están aquí" y que no hay que ocultar ese hecho sino "admitir que vivimos en una sociedad pluricultural" e intentar crear "condiciones materiales para que todos podamos al final tener posibilidades para hacer valer nuestras propuestas y no para imponerlas", remachó.

PERCEPCIONES CREADAS POR LOS MEDIOS.

Asimismo, consideró que "cerrar los ojos frente a esa realidad" provoca el surgimiento de "problemas sociales como el racismo" y puso de manifiesto que a España aún no ha llegado el porcentaje de inmigración que hay en el resto de Europa por lo que la invasión "que algunos sectores creen que estamos sufriendo" es, a su juicio, "una percepción creada por distorsiones informativas".

Estas se basan, según concretó el profesor de la UPO, en percepciones creadas, por ejemplo, con los delitos cometidos por los inmigrantes que "se magnifican en los medios de comunicación" frente a los cometidos por los ciudadanos del país "que muchas veces ni siquiera aparecen" en los periódicos. Y estamos ante un nivel de percepción cultural que muestra un "pretendido" choque entre culturas "que, en realidad, no existe".

"La historia --continuó-- demuestra que a nivel cultural nos entendemos pero el problema es que la cultura no está al margen de los intereses culturales, políticos, económicos, sociales o históricos y, sobre todo, de los intereses geoestratégicos". "Si Europa quiere abrir selectivamente las fronteras en función del mercado de trabajo, está planteando la política exterior desde la perspectiva del miedo a la invasión o a la llegada de una nueva expansión islámica y eso llega a la sociedad como un problema", observó.

Seguidamente, mostró su convicción de que "culturalmente nos entendemos bien", aclarando al tiempo que lo importante es gestionar ese hecho en los sectores populares "que son los que viven la inmigración" y a los que hay que educar en la admisión de las percepciones culturales para asumir la diversidad "como un hecho con el que hay que convivir.

Por último, Herrera aclaró que, a su entender, los inmigrantes que llegan a Andalucía suelen tener reconocidos sus derechos básicos y que su integración será un proceso que "poco a poco tenemos que ir construyendo". No obstante, sostuvo que en la comunidad andaluza "ya se han dado pasos importantes" en ese sentido.

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