Inauguración de los actos de la Semana Camerunesa. (Alex Larretxi)

Vitoria acoge por primera vez la Semana Camerunesa, mediante la que buscan aumentar la participación de este colectivo en la ciudad.

Son casi 300 y también a ellos la crisis les trae de cabeza. El colectivo camerunés que vive en Vitoria padece como el resto de la sociedad alavesa, o incluso con mayor dureza, los efectos de esta depresión económica. No en vano, el 90% de ellos se encuentra en el paro. La situación actual, unida al endurecimiento de los requisitos para acceder a las ayudas, ha hecho que muchos hayan decidido abandonar la ciudad en busca de un futuro mejor. Los que se quedan, en cambio, se muestran "cabizbajos".

Así lo asegura Chastelino Esono, presidente de la asociación camerunesa Gran Bassa"a de Álava, quien reconoce que "la inmigración en la ciudad está pasando por las horas más bajas". El cambio de rumbo en las políticas de inmigración tiene mucho que ver en ello, pero no sólo. "No podemos estar esperando a que amaine el temporal, tenemos que aportar algo a la sociedad alavesa, tenemos que ser más competitivos y crear puestos de trabajo", añade Esono.

Precisamente, despertar a todo este colectivo es el objetivo que se ha marcado la asociación a la hora de organizar por primera vez en Vitoria la Semana Camerunesa, que cuenta con todo un programa lleno de actividades hasta el sábado. Uno de los actos centrales es el debate que tendrá lugar el jueves en el centro cultural Montehermoso bajo el título La inmigración pregunta, en el que se les quiere mostrar los canales de participación que tienen a su alcance. "La comunidad inmigrante casi no participa en nada, vamos a darles a conocer los mecanismos para que cambie esta situación y se implique más con su entorno", explica.

Desde la asociación insisten en lo mucho que puede aportar el colectivo a la sociedad alavesa. "No somos gente que venimos a mendigar, tenemos ganas de trabajar", aseguran desde Grand Bassa"a. Por ello consideran injusto las políticas en materia de inmigración que están aplicando tanto desde las instituciones alavesas como desde el Gobierno Vasco, que han endurecido los requisitos de acceso a las distintas prestaciones, y también desde el Ejecutivo central, que niega la asistencia sanitaria a quienes se encuentren en situación irregular. "En lugar de crear empleo lo que hacen es echar balones fuera", añade su presidente.

Esono insiste en que esta situación ha provocado que algunos cameruneses hayan decidido emprender la marcha a otro lugar. Muchos de ellos se van a Francia convencidos de que allí encontrarán un futuro mejor. "Es doloroso, tienen que empezar de cero y a veces dejando a la familia aquí; eso no es plato de buen gusto para nadie", explica.

En la actualidad la comunidad camerunesa en Vitoria la integran un total de 300 personas, de los que sólo el 10% tiene trabajo. Desde la asociación hacen un llamamiento a todos ellos para que asistan a los actos organizados a lo largo de esta semana en la ciudad.

Programa de actos La inauguración de la Semana Camerunesa tuvo lugar ayer por la tarde en el centro cívico El Pilar con la apertura de una exposición de arte y pintura africana. Mañana, Montehermoso acogerá a partir de las 18.00 horas una mesa redonda sobre igualdad de género mediante la que se pretende sensibilizar en torno a la lacra de este tipo de violencia. "Cada vez están peor vistas las conductas machistas en nuestro colectivo, sin embargo todavía sigue habiendo gente que quiere vivir como vivieron sus padres", explican desde la asociación.

Al debate del jueves sobre la situación de la inmigración en Vitoria está prevista la asistencia de la diputada foral de Bienestar Social, marta Alaña, así como de responsables del Servicio de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Vitoria. También acudirá la responsable del centro de atención a inmigrantes Norabide, Estitxu Estévez, según informaron.

Ya el sábado, con motivo de la clausura de los actos, se ha preparado una gala benéfica para apoyar a los niños soldados de África. La asociación espera contar con la participación del diputado general de Álava, Javier de Andrés, así como de la del alcalde de la capital alavesa, Javier Maroto.