Padres, docentes y alumnos, coordinados por Elche Acoge, han puesto en marcha el plan de mediación intercultural

El IES Carrús inicia un programa de mediación para favorecer la integración y evitar los conflictos ante el fenómeno de la inmigración

El fenómeno de la inmigración está obligando a la sociedad a dotarse de las herramientas necesarias para fomentar la tolerancia, la convivencia, el respeto y la integración de quienes proceden de otros países, son de otras razas o profesan otros credos . El IES Carrús, en ese intento por evitar los conflictos interculturales, ha puesto en marcha este curso un programa de mediación en el que participan padres, docentes y alumnos y que cuenta con el asesoramiento de Elche Acoge y la financiación de CAM Encuentro.

M. J. MORA E l IES Carrús ha puesto en marcha este curso escolar un programa de mediación bajo el título «resolución de conflictos en el ámbito de la educación: la alternativa de la mediación» y en el que la comunidad educativa lleva trabajando desde hace varios cursos. «El programa abarca aspectos interculturales para favorecer la integración de los recién llegados. Por ello hemos puesto en marcha talleres de sensibilización sobre el fenómeno migratorio, cursillos de percusión, clases compensatorias, jornadas de acogida y fiestas interculturales», explicó Moisés Navarro, vicedirector del instituto.

En el proyecto colaboran, además de la comunidad educativa del centro, Elche Acoge y CAM Encuentro, y el objetivo fundamental que se plantea es crear un clima de tolerancia y de convivencia entre alumnos de distintas razas y culturas. «Lo cierto es que el ambiente de convivencia en los últimos cuatro años ha mejorado considerablemente. En estos momentos no hay muchos conflictos interculturales, sino más bien problemas entre adolescentes. De todos modos sí existe el insulto racista y eso queremos erradicarlo», señaló el vicedirector de IES.

El instituto de Carrús mantiene en los últimos años una media de un centenar de alumnos procedentes del extranjero, una situación que ha favorecido el clima de entendimiento y de integración lejos de los problemas que suponen las avalanchas. Los responsables de la comunidad educativa aseguran que los que mejor se integran son los latinoamericanos, mientras que las personas procedentes del Este son las menos participativas. El servicio de mediación que ha comenzado a funcionar este curso escolar, y que ya ha mediado en dos conflictos protagonizados por adolescentes de segundo y tercero de ESO, está compuesto por una decena de padres, doce alumnos y diez profesores. Una de las mediadoras que forma parte del colectivo de alumnas es Mónica García, quien remarca que la labor de información que se ha venido realizando en los cursos precedentes ha sido bien acogida por los estudiantes y que cada vez es más creciente el interés de los alumnos en participar en este tipo de iniciativas. «Somos pocos pero con los muchos pocos que todos hagamos podemos cambiar el mundo».

Por su parte, Teresa del Olmo es una de las representantes de los padres que forman parte de este grupo de mediación y que intentan dentro del engranaje de la interculturalidad conseguir que los adolescentes aprecien la riqueza de las distintas culturales y aprendan a convivir con personas con raíces muy distintas a las nuestras y con unos orígenes determinados.

El programa ha sido asesorado por Elche Acoge, y una de sus representantes, María Ballester, indica que el IES Carrús es uno de los centros pioneros en la ciudad en la puesta en marcha de un programa de mediación para evitar conflictos en las aulas y fomentar el clima de tolerancia.

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