El director vasco de Inmigración, Tito Marro.

Tito Marro argumenta que obedecerá al mayor control de visados en latinoamérica. El Gobierno Vasco aprobó ayer en Vitoria el segundo Plan Vasco de Inmigración, dotado con 96 millones de euros

Los responsables de Inmigración del Gobierno Vasco estiman que el crecimiento de la población extranjera dentro de la CAPV será "sostenido pero estable" a lo largo de los próximos años, aunque vaticinan que sufrirá un importante bajón y que su aumento se situará por debajo del 1% anual. El director de Inmigración de Lakua, Tito Marro, realizó esta evaluación mientras valoraba los beneficios que conllevará el segundo Plan Vasco de Inmigración, aprobado ayer en Vitoria.

El objetivo de esta iniciativa, dotada con un presupuesto de 96 millones, consistirá en aplicar medidas concretas encaminadas a mejorar los niveles de integración social de los ciudadanos extranjeros en Euskadi. Actualmente, la tasa estatal de inmigración se sitúa en torno al 10% mientras que en Euskadi asciende a tan sólo el 4%. Según calculó Marro, "en el resto del Estado creemos que el crecimiento anual será del 2%, mientras que en Euskadi ni siquiera llegará al 1%". "En ningún caso llegará a los niveles vividos entre 2000 y la actualidad, donde la llegada de población foránea vivió su punto más álgido.

El director vasco de Inmigración señaló que la ralentización en la afluencia de ciudadanos extranjeros será la respuesta a una política general de mayor dureza en los controles de los visados a los países latinoamericanos, una de las principales fuentes de inmigración del Estado.

Tito Marro explicó a este diario que, a diferencia del primer Plan Vasco de Inmigación, el segundo "es el plan de toda la Administración vasca", ya que implica a las diputaciones y ayuntamientos de la CAPV. "Hablamos de abordar un proceso bidireccional que afecta a todos y por eso creíamos pertinente que todos estuvieran representados en el documento", indicó.

Tal y como explicó el responsable vasco de Inmigración, se trata de una iniciativa creada "por y para los inmigrantes", ya que "el 70% de las medidas que contiene están tomadas del Foro de la Inmigración, en el que, fundamentalmente, participan ciudadanos extranjeros".

Uno de los objetivos en las que efectúa especial hincapié este plan es el de la inserción en el mercado laboral. "El 70% de los extranjeros empadronados en la CAPV cuenta con algún tipo de autorización laboral y sólo el 50% cotiza de alguna manera a la Seguridad Social. Debemos redoblar nuestros esfuerzos para incrementar este porcentaje, ya que la integración social pasa necesariamente por disponer de una fuente de ingresos", subrayó Tito Marro.

Javier Madrazo, encargado de la presentación del plan, apuntó ayer que las personas extranjeras que residen en Euskadi proceden de 160 países distintos y que el 80% de ellas tienen entre 18 y 65 años, por lo que se encuentran en disposición de ejercer un trabajo.

Según declaró el consejero, el segundo plan del Gobierno Vasco sobre Inmigración servirá para "poder articular una política institucional diseñada para eliminar todo tipo de discriminación por nacionalidad y garantizar el cumplimiento de los derechos de todas las personas".

Esta apuesta por la integración se traducirá además en el refuerzo de los tres pilares sobre los que se sustenta el plan, como son el Observatorio Vasco de Inmigración, Ikuspegi, el servicio de asistencia socio-jurídica a inmigrantes, Heldu, y el servicio de integración y convivencia intercultural, Biltzen.

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